domingo, 3 de agosto de 2008

Berlín "La habitación del silencio"


Puede ser una ciudad vibrante, emocionarte en todos los sentidos. Tremendamente abierta, verde y sin aglomeraciones, con bicicletas que recorren sus calles y un sin fin de turistas.
Pero en esta vorágine, museos, exposiciones, terrazas, palacios, paisajes arquitectónicos singulares, se respira serenidad. Con un corazón verde que la atraviesa irradiado con los tentáculos del asfalto en cuatro direcciones, tienes momentos para sentirte esa turista accidental, que siempre has deseado ser.
Y ese momento está justo ahí, delante de todas esas miradas que deambulan. Pero ellos anestesiados por todo lo que significó ese lugar en un momento y tiempo, lo que no deja de ser un reclamo que todos quieren captar en una foto, hace que les pasen desapercibido. Muy pocos son los que observan este letrero y se deciden a entrar.
Nosotros conseguimos ser turistas accidentales por un instante. Una pequeña habitación, unas pocas sillas y algunas personas sentadas que observan atentamente. Se deja vislumbrar tan sólo un haz de luz . Un simple intercambio de miradas. No hace falta más. Se marchan, dejándonos a solas. Ese haz de luz reposa en el centro de un tapiz rudimentario. Un punto de luz ténue. El silencio y la luz. Donde el corazón reposa aturdido y la respiración se entrecorta. Esta sensación de paz trastoca los cimientos de cualquiera. Pero no por el silencio en sí mismo, al que tristemente no estamos acostumbrados, sino por el maremagnum de sensaciones que se agolpan dentro de tí. Es compartir el dolor ajeno, es ponerte por un segundo en el lugar del otro. Cuánto dolor tuvieron que escuchar esos muros, cuantas lágrimas, cuantas vidas. Esto no se puede encuadrar en una foto. Se queda pegado a tu piel. Adherido a tu alma.

La habitación del silencio: Un punto de encuentro sin distinción de razas, de religiones, de ideologías, de lenguas... una manera de decir NO a la barbarie, No a las injusticias que nos acechan.

9 comentarios:

Miriam dijo...

Julia, te diré que con solo leerte se me agolpan las sensaciones en el alma...Tal como lo describiste debe ser un lugar lleno de almas... Se ve vacío pero debe estar lleno...
Impresionante...
Tus palabras están muy bien escritas, uno puede ver y sentir a travez de ellas.
Besos silenciosos

Javier Muñoz dijo...

tendrían que hacer un spot con tu escrito, ahora me he quedado " y para cuándo voy a la habitación del silencio"?
Es precioso todo lo que has descrito, a mí me encanta el silencio, es uno de mis placeres más mimados, me gusta saber que no soy el único que disfruta con esta bella sensación.
Saludos, abrazos y mucha, mucha suerte.

Ale dijo...

En el silencio hay tanto que se dice calladamente, pero tanto que hasta puede ensordecernos. Como bien dijiste, lamentablemente andamos sordos por la vida y sin frenar un segundo a contemplar lo que nos rodea, lo que siempre está ahí llenando de detalles los rincones, esos retazos de la gente que va pasando.

Se hace necesario estar en silencio, se hace necesario no estar todo el tiempo queriendo no escucharnos, se hace necesario volver a conectarnos con nosotros. Y dejar tal vez en ese asiento vacío un pedazo de nuestra vida, algo que otra persona pueda percibir al llenar el mismo aire... con distinto silencio.

Hermosa tu descripción :)

Julia dijo...

Miriam

Me emociona que te emociones. No sabes cuanta alegría pones en mi alma. Este es un medio, que une almas a través del silencio. Como no callar mi voz para oir las vuestras.
Gracias de corazón por pasear por este sendero mágico que nos ha unido. Te encontré en un recodo del camino y sigo tus pasos.

Doblemente, gracias.Un beso.

P.D: Miriam, una pregunta técnica... soy un poco torpe en estas lides y algo novata en esto de bloggear... La música, como intuyo para tí, es también vitamina para mi alma. Siempre me acompaña cuando leo vuestros escritos. Me encantaría poder reflejar en mi blog esos momentos. Me puedes ayudar?


Javier,

Me encanta compartir bellas sensaciones como tú dices. Creo que cada vez somos más los que nos damos cuenta la falta que nos hace este silencio compartido, esas miradas ténues, ese dejarse llevar.
Buscar un hueco por nimio que sea en esta veloz ruleta de las horas, que a veces nos aturde... y simplemente respirar.

Gracias por tus palabras. Un beso

Julia dijo...

Hola Ale,

Siempre me emocionan tus palabras. No me cansaré de decírtelo. Tienes la palabra justa para remover mis entrañas. Una facilidad de contagiar tanto con esta hermosa manera de escribir. Me nublas.
Mil gracias por leerme. Un beso

Miriam dijo...

Por supuesto Julia, puedo ayudarte con la música, solo tenemos que preguntarle a mi marido que es quien me lo consiguió. Déjame un mail tuyo para poder mandarte la información. Para esto estamos los amigos virtuales!
Gracias por tus palabras en mi blog!!
Besos

Julia dijo...

Miriam

Muchas gracias de antemano.

Este es mi email: besamo22@hotmail.com

En El Corazón del Bosque dijo...

Hola Julia, nunca había pasado por aquí. Te tengo que agradecer la visita, así te he podido descubrir.

Me encanta lo que he leido, no dudes que tienes una nueva lectora.

Un beso

My dijo...

(entro despacio y sin hacer ruido, me quedo contigo)
sshhh..